Tras una brillante actuación en el Campeonato Parapanamericano de Monterrey, con oro y triple récord incluido, la estudiante de primer año de psicología se transformó en la octava deportista chilena en obtener un cupo para los Juegos Paralímpicos de Tokio. “Es una gran responsabilidad, ya que la clasificación, al menos desde mi punto de vista, abrirá las puertas para que muchos más jóvenes y adultos con discapacidad puedan experimentar e incorporarse a este deporte”, dijo la deportista que logró conquistar su clasificación en tierras mexicanas.

Pese a llevar pocos años en el deporte de alto rendimiento, la seleccionada chilena de para tiro con arco, y estudiante de nuestra Escuela, Mariana Zuñiga, ha conquistado logros que hoy la posicionan como una de las figuras con más proyección de su disciplina. Un laureado recorrido al que ahora suma la conquista del último Parapanamericano de la disciplina en Monterrey, con oro, triple récord incluido, y un cupo en los Juegos Paralímpicos de Tokio.

Anhelada clasificación que la arquera chilena consiguió luego de vencer a la canadiense Karen Van Nest en la categoría compuesto femenino abierto, con un 144-135. Una brillante actuación que le permitirá a la estudiante, que ingresó este año a la EPUC, el tener su primera experiencia olímpica. “El hecho de ser la primera chilena que clasifica a este evento en mi disciplina significa una gran responsabilidad, ya que la clasificación, al menos desde mi punto de vista, abrirá las puertas para que muchos más jóvenes y adultos con discapacidad puedan experimentar e incorporarse a este deporte”, dijo la deportista tras su exitoso paso por México.

Un amor por el tiro con arco que tuvo su primer acercamiento a los 10 años, cuando vio por primera vez la película “Valiente”. “Como niña, quería ser como Mérida. Comencé tomando unos cursos en el Estadio Nacional, me compraron un arco para practicar en mi casa, pero todo de manera muy recreativa… Fue después de varios años, en los que no practicaba regularmente, que me di cuenta que mi interés por este deporte nunca se fue. Así que quise retomar y aprender cosas nuevas… Entré a un club, y entrenando ya de forma más continua, me contactaron y me invitaron a participar en un torneo. Ahí conozco al head coach nacional, junto con el presidente de la Federación, quienes me ayudaron a terminar la competencia en esa oportunidad. Todo esto era en un cerro, así que había que subir y bajar a cada rato… Ellos, junto con el entrenador paralímpico, me invitaron a formar parte de este equipo de tiro con arco paralímpico en proyección. Ahí fue cuando todo esto se volvió algo más profesional”.

Eres una deportista muy joven, que ha conseguido logros muy importantes. ¿Qué significa para ti, después de todo este camino recorrido, lograr esta clasificación? ¿Era algo que estaba dentro de tus planes, lo vislumbrabas como algo posible?

Veníamos preparando hace mucho tiempo este torneo parapanamericano. La clasificación a Tokio era nuestro principal objetivo. Nos esforzamos mucho y creo que hicimos un buen trabajo, porque conseguimos nuestra meta. Ahora, los récords, eso sí fue algo que me sorprendió. Era algo que no esperaba… mi mente estaba enfocada en lograr la clasificación. Quedé en shock cuando gané el cupo, pero también cuando alcancé los récords. Fue una alegría tremenda, porque creo que este tipo de logros nos da la oportunidad de mostrar a la gente que existe el tiro con arco paralímpico, que estamos acá, y que estamos logrando cosas importantes.

Estamos en medio de una pandemia e ir a competir a unos Juegos Paralímpicos en estas circunstancias, es algo muy distinto a lo que habitualmente esperamos de un evento deportivo como este. ¿Cómo vislumbras tu participación en lo deportivo y cómo enfrentas esta competencia, considerando el contexto complejo que estamos viviendo?

Creo que mi principal meta para estos Juegos es seguir trabajando de la misma manera. Seguir mejorando en el aspecto físico, pero también en lo psicológico. Este deporte es muy mental y creo que este es un desafío para seguir mejorado en todos los aspectos. Ahora, respecto a la pandemia, no es una situación fácil… Mi reciente participación en México fue el primer viaje en pandemia y fue algo totalmente distinto a una competencia normal. Son situaciones nuevas, a las cuales vamos a tener que adaptarnos. Tenemos que seguir haciendo el mejor trabajo posible con las herramientas que tenemos.

Ser un deportista de alto rendimiento en Chile, sin duda es algo complejo, y puede ser un camino aún más difícil para los deportistas paralímpicos. ¿Cómo ha sido este proceso para ti y qué te gustaría conseguir con esta participación?

Ser un deportista de alto rendimiento en Chile no es fácil, sobre todo siendo deportista paralímpico. Sin embargo, creo que como deportistas paralímpicos, tenemos la responsabilidad de hacer notar que existimos, que somos personas igual que el resto, y que podemos llegar a lograr grandes cosas.

Años atrás, cuando estuve buscando colegio para continuar con mis estudios, no me quisieron aceptar en un establecimiento, pese a mis buenas notas… Me dijeron que no eran un colegio adaptado, pero que tampoco me podían aceptar, porque eran un colegio dedicado a lo deportivo. Entonces, con esta participación, me gustaría demostrar que las personas discapacitadas podemos llegar a lograr grandes cosas. Que la discapacidad no es un impedimento para llegar a nuestros objetivos.

¿Qué características de ti crees que te han permitido calificar a estos Juegos?

Creo que lo más importante para lograr todo lo que he conseguido es la disciplina y el amor que tengo por el tiro con arco. Yo creo que esa es la clave para lograr grandes cosas. El tiro con arco para mí no es solo un deporte, es la instancia en la cual puedo relajarme y olvidarme de todos los problemas. Para mí es como la extensión de mi cuerpo.

¿Y por qué quisiste entrar a estudiar psicología? ¿Cómo vincularías tu profesión con la pasión que para ti significa el deporte y el tiro con arco?

Siento que a través de la psicología puedo generar un cambio social importante. Creo que a través de esta profesión puedo ayudar a que las personas discapacitadas, ya sean niños, jóvenes, mujeres, adultos, lo que sea… se den cuenta que tener una discapacidad no significa que no pueden lograr grandes cosas. Me gustaría motivar a la gente a cambiar esos prejuicios y esa tendencia a victimizar a la gente discapacitada. Creo que la sociedad debería ser más empática y apoyar a esas personas, sabiendo que valen lo mismo que cualquier otra.

Texto: Andrea Fuentes Uribe, Periodista Subdirección de Extensión y Comunicaciones EPUC.
Fotos: The International Federation for the Olympic Sport of Archery