Conocer cómo la identidad y los estereotipos de género tienen una influencia en la motivación por la lectura de las y los estudiantes. Esa fue la pregunta que impulsó la investigación de Ana María Espinoza, Doctora en Psicología de nuestra Escuela, reconocida recientemente por el Concurso organizado por la Vicerrectoría de Investigación de nuestra Universidad. El trabajo, dirigido por la profesora Katherine Strasser, da cuenta de las consecuencias del sexismo en la educación y la necesidad urgente de realizar cambios en esta materia.

Reconocer aquellas investigaciones que representan un aporte a la proyección de las ciencias, humanidades, artes y tecnologías, es el objetivo del Premio de Excelencia en Tesis Doctoral de la Vicerrectoría de Investigaciones de la UC. Una distinción que en esta oportunidad cayó en las manos de la Doctora en Psicología de nuestra Escuela, Ana María Espinoza.

Tras una exhaustiva evaluación de los antecedentes, la Comisión de Fallo presidida por el Prorrector Guillermo Marshal Rivera, e integrada por el Vicerrector de Investigación Pedro Bouchon Aguirre, y el director de la Escuela de Graduados Diego Cosmelli Sánchez, decidieron adjudicar a “Gender identity and stereotypes as key factors in reading motivation: Three studies in secondary school in Chile” como la ganadora del área de Ciencias Sociales.

El trabajo, dirigido por la profesora Katherine Strasser, estuvo orientado a conocer los factores psicosociales que influyen en el sexismo en la educación. “Mi interés fue ver cómo la identidad y los estereotipos de género tienen una influencia en la motivación por la lectura de las y los estudiantes adolescentes. Realicé tres estudios analizando cómo variables asociadas con el género o con las construcciones sociales en torno al género, tienen un impacto negativo en la motivación lectora de estudiantes hombres”.

Los resultados de la investigación, evaluada con distinción máxima en su oportunidad, arrojaron que efectivamente aquellos estudiantes que tienen más estereotipos de género asociados a la lectura creen que la lectura es cosa de mujeres. Y, cuando se trata de estudiantes hombres, esto influye negativamente en el valor que se le otorga a la lectura. “Vimos como aquellos estudiantes, hombres y mujeres que se identifican a sí mismos con rasgos estereotípicamente femeninos, como ser comprensivo/a, tierno/a, o cariñoso/a, están más motivados por leer que los estudiantes que se identifican menos con esos rasgos. Ahora, respecto a la visión que existe sobre las personas a las que les gusta leer, nos dimos cuenta que son percibidas, tanto por estudiantes como por docentes, como menos masculinas, menos populares, y con menos habilidades sociales. Esto, pese a que en términos generales son percibidas como mejores estudiantes”.

Visibilizar los estereotipos

MG 3284 1 768x512Pensar que los niños son más inquietos, más bruscos y más líderes; mientras que las niñas son más tranquilas, delicadas y tiernas, sí tiene un impacto en aquellas áreas del conocimiento por las cuales se motivan. Un impacto en el aprendizaje que, de acuerdo a la investigadora, queda claramente en evidencia en las brechas de género en el aprendizaje de la lectura. “Lo que queríamos demostrar con esta tesis es cómo los estereotipos de género y el sexismo en la educación tiene un impacto negativo en las trayectorias de aprendizaje y desarrollo… Cómo limita a hombres y a mujeres”.

En ese sentido, la Doctora en Psicología de la UC señala que este reconocimiento permite relevar la importancia de avanzar hacia una educación no sexista, que ofrezca las mismas oportunidades de aprendizaje y desarrollo para todas y todos. “Y esa es una tarea de la que se tiene que hacer responsable la academia. El hacer difusión a la sociedad y a los actores del sistema educativo de la importancia de abordar esta temática. Tengo la convicción de que visibilizando este tema y sus consecuencias negativas para el estudiantado, se pueden comenzar a hacer las transformaciones que la sociedad requiere. Se puede trabajar una perspectiva de género en la formación inicial docente. Esta investigación busca contribuir en esa dirección”. Una opinión en la que coincide Katherine Strasser, profesora que dirigió su tesis. “Me parece que el principal aporte es que visibiliza una de las consecuencias que tienen los estereotipos de género en la educación, en este caso con la motivación lectora de los estudiantes varones. Eso da pie para que se puedan tomar medidas o diseñar intervenciones que permitan prevenir los efectos que tienen estos estereotipos. Permite visibilizar el problema”.

Texto: Andrea Fuentes Uribe, periodista Escuela de Psicología UC.