El proyecto demostró que se pueden abordar los objetivos de aprendizaje, al menos igualmente bien que las actividades tradicionales como guías o clases expositivas, y trabajar varios núcleos a la vez.

Desarrollar y evaluar científicamente juegos de reglas y materiales lúdicos para abordar los objetivos académicos de las bases curriculares en forma lúdica, flexible y entretenida, fue el objetivo principal que se planteó el proyecto FONDEF IDEA “Suplemento basado en juegos para el desarrollo del lenguaje, alfabetización, conocimiento numérico y autorregulación en niveles medios y transición de educación parvularia”, liderado por nuestra académica EPUC Katherine Strasser, y cuyos resultados fueron presentados en el marco del seminario “Aprender Jugando: Herramientas Innovadoras para la Educación Temprana”.

«Aunque hay muchos tipos de juego, nosotros nos concentramos en hacer juegos de reglas, que pueden cumplir un rol similar al del juego libre y al del juego guiado en el aprendizaje (…) son juegos que implican diversión, curiosidad e inhibición de la realidad en un contexto activo, participativo, significativo y socialmente interactivo», explicó Katherine Strasser.

En el proyecto, aplicado en seis salas de transición de dependencia municipal, tres de prekinder y tres de kínder, más un grupo de control, también trabajaron nuestros académicos Valeska Grau, David Preiss y Diego Cosmelli, y los investigadores Anneliese Marín (UC), Jaime Balladares (Facultad de Educación UC), Daniela Jadue (Universidad de O’Higgins) y Vivian Singer (Universidad Alberto Hurtado). Junto a ellos, un equipo de educadoras de párvulos, psicólogas y diseñadoras estuvieron durante dos años creando, probando y evaluando la eficacia de los juegos y materiales lúdicos en el aprendizaje.

Luego de armar las maquetas y pilotear nueve juegos sucesivamente (cada sala fue visitada tres veces para cada juego), se observó autonomía, disfrute, aprendizaje y factibilidad en seis. Vecinos de América, La Granja Loca, Atrápame, La Pizzería, Sopa y La Pesca, fueron los juegos escogidos. A través de éstos se desarrollan habilidades de categorización; resolución de problemas matemáticos sencillos; reforzamiento del vocabulario disciplinar aprendido en una unidad temática; nociones de lectura y escritura; sumas básicas; y conciencia fonológica -como identificar sonidos iniciales o finales-.

Sobre los resultados

En un contexto nacional en el que, según indicó Valeska Grau, “el juego se ocupa muy poco en el aula y cuando ocurre, es en su mayoría juego iniciado y dirigido por las educadoras, y en el que además hay una demanda de escolarización de los niños y la percepción de directivos y de las familias de los niños de que lo lúdico no es significativo”, el proyecto demostró que se pueden abordar los objetivos de aprendizaje, al menos igualmente bien que las actividades tradicionales como guías o clases expositivas, y trabajar varios núcleos a la vez.

En cuento a los resultados en matemáticas y lectura los párvulos de Kinder que jugaron los juegos mejoraron más en las pruebas de problemas aplicados, reconocimiento de letras y palabras, y conciencia fonológica que los del grupo control, mientras que en Prekinder no hubo diferencias, como tampoco las hubo en los resultados en autorregulación o de la cualidad del involucramiento de los niños y niñas. Ahora, interesante es mencionar que el humor en el lenguaje de la educadora y la técnico fue mayor durante el juego que en actividades no lúdicas, y que un 17% más de párvulos participaron cuando la experiencia era un juego.

“Se mostró que tanto los niños y niñas como las educadoras disfrutaban participando, que (los juegos) eran fáciles de usar con el curso completo (…) y la diversión del juego no está solamente en la dificultad de resolver el problema, los podrías hacer siempre igual y no debería ser mucho menos entretenido que la primera vez, pero igual se ofrecen alternativas de complejización que se pueden usar a lo largo del año o para distintos grupos”, añadió Katherine Strasser.

DESCARGA AQUÍ la presentación completa del proyecto.

Información Periodística: Gina Norambuena Martínez.